TEMPORADA 1991/92: MÁRMOL MACAEL 0 - TOLEDO 0


La ‘casta’ verde mantiene la esperanza

En la segunda parte pudo decidir

Crónica realizada por J. Eloy García Orozco, publicada en el diario “Ya” el 15 de junio de 1992


Campo de Vistalegre, en La Garrucha. Lleno, con muchos seguidores del Toledo. Buen estado del terreno de juego pese a la gran cantidad de agua caída ayer y durante el transcurso del partido. Luz artificial en toda la segunda parte.

Alineaciones

Mármol Macael: Bernal, Peque, Macanás, Tinas (Cordero, m.47), Gil, Navarro, Autton, Prieto, Cisco (Joaquín, m.80), Quico Aranda y Carlos Santiago.

CD Toledo: Villalvilla, Gabi, Cano, Abel, Pedro Díaz, Luis Castro, Oscar Engonga, Dani, Canito (Pardina, m.89), Luisito (Paniagua, m.74) y Moreiras.

Árbitro

Almendros García, auxiliado por Sonequera Alcaraz y Simos Mascarell. Buen arbitraje en líneas generales. Ni se complicó la vida ni se la complicaron. Tarjetas para Oscar Engonga y Dani, por el Toledo, y Cisco, por los locales.

Comentario

El Toledo logró un empate que deja las cosas como estaban después del 0-0 de sus dos rivales, que deja la definición del ascenso a Segunda para los dos últimos partidos. Un empate justo, si se tiene en cuenta la tensión y presión de los primeros cuarenta y cinco minutos, dieron paso a una mayor capacidad ofensiva de ambos equipos, pero sobre todo de los de Cruz.

El Toledo se centró en no perder el control y la situación posicional, por lo que las marcas fueron su principal preocupación. Emilio Cruz, con la situación de Abel por delante de Cano, dio la consigna de que Engonga –excelente encuentro- como Dani, no dejaran distancias entre defensa y medio campo. Otro cantar era en ataque, donde Luis Castro y Canito estaban muy distanciados de poder controlar cualquier balón, también porque no era un partido para el lucimiento. Los cuarenta y cinco minutos iniciales dieron poco más de sí, y Villalvilla sólo tuvo que ‘apretar los dientes’ en dos tiros a balón parado de Prieto y Aranda. Por parte verde, un tiro flojo de Dani y otro de Canito, en el descuento.

La segunda mitad tuvo distintos auspicios, sobre todo el Toledo, que aparte de mantener sus constantes vitales, comenzó a denotar mejor preparación. El desgaste inicial de los de Cruz no pasó factura, y a poco dio la sensación de que podía llegar el gol verde. Pero no remataron.

En resumen, el Macael no se comió al Toledo, y éste, lejos de arrugarse ante el rival, mostró la casta que tantas veces ha señalado su técnico para, al menos, salir indemne y airoso de este lance.