No sé qué, pero hay que hacer algo. Me huelo que este año, al final de esta competición, van a ocurrir cosas muy extrañas (caso Compostela ... ¿quién lo diría?) y pienso que el Toledo, si todavía fuese capaz de ganar un par de partidos, de los cinco que aún restan (tampoco se está pidiendo un milargo, ¡leche!), podríamos jugar la promoción. Acordémonos del año del descenso a segunda B que, de los equipos condenados al descenso, tan sólo el nuestro, no pudo beneficiarse de la debacle de otros.
Muy difícil el intento con lo que tenemos, lo sé; pero hay que buscar algún revulsivo para lograr la permanencia PORQUE AÚN ESTAMOS A TIEMPO. Me permito vaticinar (sí, sí, reiros) que si el Toledo baja este año, tal y como están las cosas, podría desaparecer como entidad. Otra cosa será que volvamos a resurgir desde la segunda autonómica, como ya se quiso hacer el pasado verano. Soplemos entre todos la brasa de la ceniza e intentemos reavivar las posibilidades de permanencia.
A ver, aficionado, ¿qué idea posible aportarías a la directiva, como medida de salvación, para no descender este año?