Foro de los aficionados al Toledo

Con permiso del compañero Juvenil_1928, me he permitido trasladar este magnífico pensamiento (a mí me lo parece) del periodista deportivo Carlos Sánchez Blas sobre el trato al fúbtol actual y a sus aficionados. Creo que se merece un post aparte y muchísimos comentarios. Estamos faltos de posts últimamente y esta es una buena ocasión para debatir sobre el fútbol actual y todo lo que lo redea.

Texto íntegro del pensamiento de Carlos Sánchez Blas:


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Os he contado muchas veces que del fútbol me gustan, sobre todo, dos cosas. Por este orden, los hinchas y el fútbol. Sí, el propio fútbol, que ahora queda en un segundo plano por culpa de la glotonería de esa bestia formada por la pseudopolémica, la salsa rosa, la anécdota y la permanente confrontación. Sí, definitivamente me gusta mucho el fútbol, cada vez más.

Cuando uno admira la pareja fútbol-hinchas, cuando uno se emociona con las tradiciones, con los códigos heredados de nuestros mayores, con el olor y el sabor incomparable de algunos estadios y algunas aficiones, se tiene que rebelar contra las continuas faltas de respeto que los hinchas sufren en España. No por costumbre es menos sangrante asistir al continuo ninguneo por parte de esos corbatas que viven del fútbol, y que lo moldean para servir intereses siempre poderosos y crematísticos.

Pienso como un hincha y escribo como un periodista. No sé si lo hago mal o peor, pero lo hago firmemente convencido de que es mi obligación, la obligación de mi profesión. Debemos denunciar que los corbatas de nuestro fútbol quieren los estadios vacíos y los sofás llenos. Así de contundente, así de diáfano. Podéis estar de acuerdo o no con la forma de dirigir de aquellos que ocupan cargos de (ir)responsabilidad en el fútbol español, pero es importante que no os engañen. A ellos el hincha les interesa una mierda. A ellos sólo les interesa vivir del fútbol. De hecho, está probado que alguno de ellos ha vivido durante muchos años de la porquería del fútbol. Así de claro, aquí sobran los paños calientes.

Crujir al Athletic con partidos todos los lunes a las 22 horas es maltratar a la afición vizcaína. Programar un Valladolid – Málaga o un Villarreal – Granada un viernes night es enterrar a los equipos y sus aficiones en la clandestinidad. Poner las entradas entre 30 y 70 euros para un Getafe – Celta es condenarse al cemento en tu estadio. Despreciar a los hinchas del Rayo poniéndoles mil trabas para que no viajen fuera de Vallecas es deleznable… y eso lo hace a menudo la directiva de uno de los clubes más humildes de España. En Alemania, un país con un poder adquisitivo bastante mayor, se puede asistir a un partido de la Bundesliga, incluidos BayernMunich, BorussiaDortmund y Bayer Leverkusen, por 10 euros. Es más, los aficionados teutones que se desplazan con su equipo ven en muchas ocasiones incluido en el precio de la localidad el viaje en tren. Las culturas son diferentes, pero el respeto al hincha también. Aquí en España ese hincha es orinado sin piedad con demasiada frecuencia.

Rabio por dentro cuando escucho a algún mandamás de corbata limpia y conciencia sucia afirmar sin rubor que el fútbol debe ser un artículo de lujo, como si fuera un pecado que cualquiera pueda disfrutar de la actividad de ocio más antigua del mundo. Me niego a que los sentimientos, los sueños, los recuerdos, las alegrías y las lágrimas queden sepultadas bajo el ansia de poder y de influencia de unos cuantos corbatas. Resulta bochornoso tener que asistir a las tragaderas interminables de los presidentes de clubes españoles, que se encadenan a los contratos televisivos porque son incapaces de gestionar con eficacia y decoro una entidad deportiva. No me gusta tener que agacharme, pero cada semana me agachó más no vaya a ser que se acabe la limosna. Patético.

Jamás cometería la indecencia y la irresponsabilidad de hablar en nombre de todas las aficiones del fútbol español. Pero si me atrevo a afirmar que muchos hinchas, sobre todo aquellos de equipos humildes que han sido gestionados de manera catastrófica durante la época en la que Tebas cobraba (y muy bien) de las interminables concursales, prefieren un club en Segunda B o Tercera con valores, limpieza y pagos al día, que uno en Primera con un socavón gigantesco lleno de porquería hasta el mismo borde. Hasta los románticos como yo pensamos que es una quimera, pero los corbatas se merecen una huelga masiva de aficionados. Unos cuantos personajes nocivos para nuestro balompié desean llevar al extremo esa máxima de estadios vacíos, sofás llenos. Deben saber, les tenemos que recordar que un estadio con futbolistas, balón, entrenadores y árbitro no vale para nada si las gradas están desiertas. El fútbol sin hinchas no es fútbol.




Editado 2 vez/veces. Última edición el 05/10/2013 09:44 por COULOUSCOU.

Totalmente de acuerdo con este joven y buen periodista. En algunas de sus frases es como si me hubiese leído el pesamiento. No puedo estar más de acuerdo.

A propósito, no le conocía, pero tiene un blog bastante interesante con artículos, en mi opinión, buenísimos. Me he recreado en el titulado "El fútbol es garganta". Os pego el enlace de este blog. Echadle un vistazo, merece la pena.


[www.elgoldemadriz.com]








"Es mejor estar callado y parecer tonto, que hablar y despejar las dudas". (Groucho Marx).

Efectivamente, muy bueno el artículo, con cuyo contenido yo también estoy de acuerdo, y, a mi modesto entender, con notable calidad literaria.

Muy buen periodista (lo conocía de Onda Madrid) y excelente reflexión. Se cargan el fútbol poco a poco

Gran articulo. Pero este problemo no solo radica en el futbol sino en el deporte en general solo hay que ger la liga ACB y la asobal en esta ultima ya tras la desaparicion del atletico ya sabemos el ganador lo mismo pasa en la acb donde se disputan el titulo barca y madrid ademas de que en los 2 ultimos años no ha ascendido ningun equipo por el canon que hay que pagar

Si esta muy bien ,pero? que os iba a decir ,eso si con todos mis respetos :esto con menos palabras no puede decir ? jaajajjaajajaaaa
CD TOLEDO HASTA LA MUERTE

tonitolon Escrito:
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> Si esta muy bien ,pero? que os iba a decir ,eso si
> con todos mis respetos :esto con menos palabras no
> puede decir ? jaajajjaajajaaaa
> CD TOLEDO HASTA LA MUERTE


Si no te interpreto mal, estimado Toni, creo que lo que has querido decir es que se pueden decir las cosas de forma más escueta y sin adornos; es decir, sin enrollarse, al grano y "a otra cosa, mariposa".

Pero todo en la vida es cuestión de gusto y estilo; en cuanto a la comunicación se refiere, depende de cómo te lo cuenten y sepan contar. Yo, esta cuestión, la veo de la siguiente manera. Trataré de explicarme con el siguiente ejemplo:

1.- Imagínate que entras en una cafetería y te acercas a la barra para tomar un café; se lo pides al camarero, que en esos momentos conversa amigablemente con otros clientes, te lo sirve sin dirigirte la palabra, te dice el precio, le pagas con propina, y, sin darte siquiera las gracias, te da la espalda para reincorporarse rápidamente a la tertulia que, de muy mala gana, había abandonado para atenderte.

2.- El mismo caso anterior; pero aquí, el camarero, además de servirte el café, te saluda sonriente y con afecto, te pregunta por el tiempo que va a hacer y, aunque no te conozca de nada, intenta darte un poco de conversación, y, por supuesto, al dejarte para volver con sus amiguetes, celebra con una agradecida expresión la propina que le has dejado.

Huelga más comentario. Creo que me entiendes. En ambos casos se cumple la misión, que no es otra que la de servir un café a un cliente, pero de muy distintas maneras. ¿Con cuál de las dos te quedas, Toni? ¿Con la del camarero de pocas palabras y "cara de alpargate", que cumple escuetamente su misión sirviéndote el café sin más pérdida de tiempo, o con la del que te ha dispensado buen trato, aunque resulte un poco pesado?

Probablemente, me dirás que no es lo mismo; puede que lleves razón, pero yo lo veo así.
Desde luego, si el camarero es tan pelma atendiendo como yo expresándome con la palabra, se queda sin clientela. De eso estoy seguro.

Celebro que te vayan bien las cosas, amigo. Un saludo.

Y sin permiso COU.

El fútbol en España agoniza y pocos nos damos cuenta de ello. Hablando del tema del Getafe siempre me preguntaba la razón por la que a su presidente le interesaba poner las entradas (no hablamos de abonos, de los más caros de primera) a 40 euros teniendo el campo vacío en lugar de ponerlas a 15 y tener una asistencia digna de la categoría en la que milita su club, económicamente no saldría perjudicado, ya que el poco dinero que saca actualmente de entradas, es el que viene de la afición visitante. La única conclusión a la que puedo llegar, es que a ciertos presidentes no les interesa tener una masa, que en ocasiones puede ser crítica, para que ellos puedan hacer y deshacer a su antojo en lo que desgraciadamente es su "empresa". ¿Os creéis que el Depor con todo lo sucedido este verano hubiera salido compitiendo en 2ª División si tuviera una masa de seguidores como el Getafe? Evidentemente no, Lendoiro hubiera hecho lo que le hubiera apetecido sin prácticamente presión, y primero paz y después gloria.

Para que el fútbol en España no muera, la gente del fútbol no debería conformarse con pedir a su directiva que si algún día se sube de categoría se acuerde de los socios más fieles, no. Tampoco me parece bien, cuando desde aquí alguno pide que se le de un palo a la afición visitante porque va a venir en masa. Ojalá estuviera el Salto del Caballo todos los días con la zona visitante también repleta de gente, y no por lo que dejen en las arcas, sino porque esa es la esencia del fútbol, apoyar, viajar, gritar, conocer, disfrutar...

Yo por diversas razones estoy viviendo en el extranjero más que aquí. Sin ir más lejos, el año pasado me "zampé" más de 10 partidos de la Primera división polaca, y para todos los partidos, jugara el equipo local contra el Legia o el Ruch, el Lech Poznan o el Wisla Krakow, la entrada era de 5 euros, no jugaba Messi, ni Cristiano, pero allí todavía el fútbol profesional tiene ese aroma popular que tanto nos gusta a algunos.