Estoy y no estoy de acuerdo con vosotros.
Partiendo de la base de que a mí tampoco me gustan las Navidades, lo primero que no habría que celebrar son los Santos Inocentes. ¿Por qué? Por el significado inicial que tiene esta fecha.
No sé cómo llegó al punto de empezar a gastar bromas, pero el suceso inicial para nada fue una broma.
En lo que estoy de acuerdo es el derroche de comida que se hace. Es demencial. Se ponen cantidades que o nunca terminas o te inflas hasta los pulmones. Y, efectivamente, hay mucha pobreza repartida por el mundo.
Y además, por supuesto, el consumismo excesivo que hay.
Pero en lo que no estoy de acuerdo es en lo de que hay que reflexionar, o estar tristes, o... etc. etc.
Durante todo el año vemos esa situación de pobreza y miseria en el mundo: TV, radio, periódicos... Y aquél que no sienta un mínimo de repudia a los dirigentes del mundo por ni siquiera intentar arreglar en parte (por lo menos) esta situación, no es persona.
Pero también es cierto que todos los demás tienen también su vida propia. Las Navidades son las fechas en las que mucha gente tiene una única oportunidad para reunirse en familia, celebrarlo, contarse muchas cosas, etc. etc. Y desde luego, después de estar todo el año, como he dicho, viendo noticias de pobreza, lo último que se ocurre en esas fechas es ponerse a hablar también del tema y "amargarse".
Yo tengo un chavalín apadrinado y es lo que debería tener todo el mundo. Por lo menos uno. Y dirá mucha gente: ¿y qué se soluciona ayudando sólo a uno? Pues la respuesta es simple. Ese apadrinamiento realmente es simbólico, porque el dinero que tú das es realmente para toda su comunidad.
Si todo el mundo apadrinara, serían muchas comunidades las beneficiadas.
Y seamos realistas, a día de hoy es la única mano que podemos tender los de a pie.
Por lo tanto, totalmente en contra de los Santos Inocentes y el consumismo excesivo, y a favor de la celebración de estas fechas (para quien le guste). Para reflexionar y estar tristes, como he dicho antes, tenemos casi un año completo.
PD:
El Día de los Santos Inocentes es la conmemoración de la matanza de todos los niños menores de 2 años nacidos en Belén, ordenada por Herodes con el fin de deshacerse del recién nacido Mesías.
Incoherencia en las fechas
La Iglesia recuerda este acontecimiento el 28 de diciembre, aunque de acuerdo con los Evangelios, la matanza debería haber sucedido después de la visita de los Reyes Magos al rey Herodes (uno o dos días antes del 6 de enero (aunque también la fecha de la adoración de los Reyes Magos a Jesús es tradicional y tiene raíces míticas). Sin embargo es admitido por la Iglesia Católica que las fechas de Navidad y Reyes son sólo conmemorativas y ese mismo valor debe tener esta misma fecha. Ni el 25 de Diciembre, ni el 28 de Diciembre ni el 6 de Enero tienen valor histórico, sino litúrgico
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Nadie te puede hacer sentir inferior. Sólo lo que tú te dejes.
¡¡¡¡AUPA TOLEDO!!!!