Pero, vamos a ver; ¿es que no queremos ver que, hoy por hoy, tanto los directivos del CD.Toledo (grupo toledano), con su generosa pero insuficiente aportación económica, como los seguidores del mismo que solo podemos ofrecer nuestro apoyo moral y poco más, estamos en manos de un grupo llamado Milenium y que, nos guste o no, al posibilitar la no desaparición del club se hicieron los amos y señores del mismo?. Así puede entenderse que un empleado se le suba a las barbas al que, sobre el papel, es su jefe. En mi opinión tal empleado es un señor "tapadera", bien remunerado, mediante el que se canaliza la forma de ir reembolsando los pretendidos réditos que esperan obtener del negocio. Cualquier buen emolumento a costa del Toledo (ej. comisiones altas) forma parte de tal entramado. Que nadie espere, pues, ningún beneficio que pudiera obtenerse por tal o cual jugador que pudiera dar algo, económicamente hablando, al Toledo. Esto es lo que tenemos ¡¡Y GRACIAS!!. El fútbol, amigos míos, ha llegado, desgraciadamente, a ésto. Pensar, para que nos sirva de consuelo, que el mal es general. Esto se acabará el día en que la afición al fútbol dé la espalda a este tinglado y retornemos al comienzo del deporte por el deporte. El espectáculo hay que pagarlo, y caro, de alguna manera.